Durante la actuación del Acer Arena de Sidney, Australia, Justin Bieber se vio sorprendido por una lluvia viscosa: 1 docena de huevos lanzados por sus anti-fans. Parece ser que los australianos sí que saben demostrar el ‘aprecio’ que les tienen a los cantantes que les visitan. Por lo visto el niño les mola ‘un huevo’ y han querido demostrárselo… literalmente. ¡A huevazo limpio!

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Y Justin, sorprendido de que no sean braguitas u osos de peluches, evidentemente se molestó con este hecho. ¡Es que la clara de huevo abría podido estropear su flequillo! Por suerte (o no) los huevos no le dieron.  No quiero imaginarme que hubiera pasado si un huevazo le impacta en la melena más perseguida y mejor pagada de eBay. Hubiese sido gracioso el asunto, para que engañarnos.

Dejando la ironía a un lado, si no te gusta Justin Bieber, no vayas a verle cantar. Pero me parece una gilipollez total  (a la par que maquiavélico) ir hasta el Acer Arena sólo para tirarle una docena de huevos al chaval ¡y encima no darle!… triste, triste.