Una de las ventajas de estar en Madrid, es que uno puede escuchar la rumorología comunitaria, que aunque no se lo puedan creer es enorme, y así hacernos una idea de lo que se cuece en el mundo. Aunque no siempre son exactas, siempre hay europeos (y europeas, por el tema de la igualdad) bien enterados y, además, las políticas de izquierda del mundo entero fascinan a los nostálgicos comunistas europeos.
Lo primero que ocurre en Europa es la extrañeza: Perú crece a tasas que ya querrían para si todos los países europeos, incluyendo Alemania, y aún así la población del Perú quiere un cambio de tendencia política en el gobierno. Eso les asusta.. y desconcierta.
Una de las cosas que se dan por seguras es un aumento desmesurado de impuestos en el Perú como pretexto para aplicar medidas sociales. Esta redistribución de la riqueza que se crea, vía impuestos, suele llevar a los países a la pobreza. Porque se desincentiva la creación de riqueza, y no se puede redistribuir lo que no se tiene, pero como se encaga el gobierno de redistribuir, si no hay se endeuda, con lo que genera al final pobreza para todos y, eso sí, la redistribuye. En la página 70 de su plan de gobierno (que se lo han leído en Europa, no se si alguien se lo ha leído en Perú) que ha titulado “La gran transformación”, Humala señala que “para que el Estado pueda cumplir con sus funciones (…), el objetivo de la reforma debe ser elevar la presión tributaria hasta ubicarla, en una primera etapa, entre 18% y 20% del PBI”. Es decir, propone una reforma tributaria con medidas bastante claras.
Las medidas peligrosas, a nivel de impuestos serían:
- La elevación del peso de los impuestos directos mediante el aumento de la tasa de impuesto a la distribución de las utilidades de 4.1% a 5.6%” con el objetivo de que el impuesto a la renta suba hasta el 35%, una cifra que tiene Chile, según su mismo plan señala, algo que por cierto no pasa desaparecido ya que dicho país no es exactamente de los favoritos del nacionalista.
- Además, quiere aumentar el impuesto al patrimonio reajustando “el valor de la propiedad predial”. En otras palabras, los propietarios de inmuebles tendrán que pagar más impuestos, al igual que los que reciben una herencia.
Es decir, ahora que los peruanos están invirtiendo en conseguir su casa propia, viene este iluminado y quiere llenarlos de impuestos por tener su casa. ¡Lo que faltaba!
Otro de los rubros donde quiere subir los impuestos es en la propiedad de vehículos, que en Perú se dicen carros y en España se dicen coches: “Ampliar la base tributaria del impuesto vehicular, extendiendo, de manera concertada, el impuesto a vehículos con más de tres años de antigüedad“. Sin duda, en este punto afectará a una enorme porción de los propietarios de vehículos ya que se trata de un parque automotor que promedia los 15 años de antigüedad. Así que los que quieran pagar más impuestos por tener un carro, ¡que le voten!
Como es evidente, tampoco se salva la industria minera, sin duda una de las más importantes del Perú, y que ha sido materia de polémica y discusión durante toda la campaña electoral. Humala propone “establecer el impuesto a las ganancias extraordinarias en las actividades mineras para financiar las políticas sociales” llegando a tasas de entre 40% y 45%. Eso si, a que llama ganancia extraordinaria no se sabe. Lo que si sabe es que muchos peruanos bien pensantes pero mal instruidos, piensan que como los productos “commodities” como el petroleo o el oro tienen ganancias extraordinarias entonces hay que cobrarles más impuestos. Y se resienten que no les cobren más impuestos, resentimiento que está aprovechando Humala. A estas personas de buen corazón, les digo que no se dejen engañar. Que el impuesto a la renta es un porcentaje en utilidades. Es decir, si se cobra el 30% y el precio de venta sube mucho, entonces aumentan las utilidades y ya se cobran más impuestos. Y que recuerden que poner tasas de impuestos adicionales lo único que consigue es desincentivar dicha actividad productiva, lo que hace que finalmente no se cobren los impuestos adicionales porque no se produce lo suficiente.
Lo de que es un satélite de Hugo Chavez, se asume directamente como cierto. Nadie duda que Hugo Chavez es el padrino de Ollanta Humala; tal y como parece haber confirmado el propio bolivariano en sus palabras que le dedicó durante su visita oficial a Uruguay calificándolo de “buen soldado”.
Además de ese cambio en la política económica, Humala parece querer una prensa “ordenada” a imagen y semejanza de lo que tiene en Venezuela Hugo Chávez. Esto es un clásico en los gobiernos de izquierda: la censura de la libertad de información. Porque controlando la información, ya sea coimeando o con la fuerza policial-militar, esperan que la población no se entere de la situación y no se genere una opinión contraria al gobierno. Cualquier parecido con la dictadura del general peruano Juan Velasco Alvarado (1968-1975) cuando confiscó los medios de comunicación de sus legítimos propietarios sería pura coincidencia. Aunque no me crean, aquí los de izquierda saben que existió un izquierdista golpista que, según ellos, quiso lo mejor para los peruanos, aunque lamentan que sus planes no funcionaran. Pero esto es característico de la izquierda europea: siempre lamentan que sus planes redistributivos de la riqueza fallen vilmente, y se olvidan de las muertes por la represión izquierdista y de la pobreza que crean, culpando de todo al capitalismo, como no podía ser de otra forma.
Aunque hay muchos puntos controvertidos, resalta también lo expuesto en la página 81 donde habla de la nacionalización de actividades estratégicas. En su característico discurso antisistema, apunta que “las políticas neoliberales han permitido a las empresas extranjeras usufructuar de la explotación de nuestros recursos naturales” y que “el Perú como nación no ejerce soberanía sobre sus recursos naturales ni sobre sus actividades estratégicas para el desarrollo“. Bla bla bla bla.. es el clásico discurso de izquierdas que esconde algo por detrás. ¿Y saben que dicen en Europa que esconde esa frase? Que para conseguir esas cosas, va a cambiar la Constitución para poder reelegirse indefinidamente, una de las políticas que aplican los izquierdistas como Chavez y sus gobiernos satélites.
Los peruanos tienen ahora mismo en sus manos la oportunidad de votar por un cambio de gobierno que ayude a mejorar a todos los peruanos. Pero Ollanta Humala, ténganlo por seguro, se va a encargar de hundir al país. Lo que sería una pena. Después de mucho tiempo, el Perú esta volviendo a crecer de manera consistente. No desperdicien su oportunidad. El domingo, cuando votemos, votemos con la mano en el corazón. Y en mi caso, es imposible votar por alguien como Ollanta Humala, que se va a dedicar a destruir el bienestar del Perú. Como dijo Vargas Llosa, Ollanta Humala es como el sida para el Perú. Por favor, salven al Perú, no voten a Ollanta Humala.
Una respuesta a “Los planes de Ollanta Humala: Lo que se comenta en Europa”
[…] llevará (con el dolor de mi corazón) Ollanta Humala, el candidato de izquierdas del chavismo (sus propuestas aquí). Aunque gane, no podrá ser presidente del Perú porque no obtendrá el 50% de votos que necesita […]